Nuestra propuesta nace de la búsqueda de conectar nuestras raíces con la música que, durante este tiempo, nos ha ido acompañando por diferentes lugares de la geografía asturiana. Queremos, pues, dar cabida tanto a música de grupos asturianos como Nuberu o Felpeyu, o cantantes de la talla de Tino Casal y Víctor Manuel como a la voz de artistas como Rozalén o Celtas Cortos que comparten con Asturias una historia y una forma de hacer música comunes. La guitarra, el violín, las percusiones y las voces serán los instrumentos que nos ayuden a contar la historia del fin de la minería y también de lo que ha acompañado a esa realidad: la diversidad cultural y lingüística, la historia española de posguerra e incluso las festividades asturianas y su valor social para varias generaciones.
La actuación, presentada a modo de concierto, incluiría explicaciones tanto musicales como históricas sobre las piezas que se vayan interpretando, buscando crear una conexión directa con el público en la medida de lo posible. Por la naturaleza de las obras que interpretaremos y por ser dos de los componentes del grupo de la Cuenca del Nalón, consideramos que sería verdaderamente interesante tener la opción de realizar la actuación dentro de esta zona, pero también podría estar muy bien compartir esta realidad con otros lugares de la provincia, cuya historia industrial y cultural se podrá asemejar en gran medida a la nuestra.
Creemos que la música es la herramienta más poderosa a la hora de transmitir emociones e historias, por lo que esta sería una enorme oportunidad para reflexionar sobre nuestro pasado de una forma especial.